Responsabilidades políticas en materia de vivienda

En Aragón la vivienda sube el doble que la media española. Ante este panorama hay quien pretende nadar y guardar la ropa. Incluyo aquí las críticas del PAR al gobierno municipal de Zaragoza (PSOE-CHA) y mi respuesta a esas críticas. El PAR elude referirse a su participación en el Gobierno de Aragón (PSOE-PAR) y su más que evidente responsabilidad en la materia.

Las últimas noticias sobre el encarecimiento de la vivienda han ocupado las cabeceras de los periódicos aragoneses. Nuestra comunidad ha encabezado la subida, duplicando las tasas españolas. Particularmente Zaragoza ha sido la ciudad en donde más han subido los precios. No debe olvidarse que en Zaragoza y su entorno se agrupan -nos agrupamos- el 70% de los aragoneses.

EL PAR DENUNCIA EL “ABSOLUTO FRACASO” DE LAS POLÍTICAS MUNICIPALES DE VIVIENDA DE PSOE Y CHA EN ZARAGOZA

Y aquí mi respuesta:

Las críticas del PAR en materia de vivienda

Por su presencia en el Gobierno de Aragón y su innegable responsabilidad en la política del Ejecutivo, quizás no sea el PAR el partido más legitimado para verter críticas por el encarecimiento de la vivienda en Aragón.


Las críticas del PAR a la política de vivienda del Ayuntamiento de Zaragoza me parecen un flagrante acto de hipocresía. Es cierto que Zaragoza ha sido la ciudad española en la que más ha crecido el precio de la vivienda en España, pero no conviene olvidar que en Zaragoza también ejerce sus competencias el Gobierno de Aragón, del que forma parte el PAR. Así pues, sus iniciativas o su falta de ellas, han influido y de forma no pequeña a agudizar en Aragón, y particularmente en Zaragoza, lo que ya es un problema grave en toda España.

Cierto es que Belloch no ha cumplido aquellas disparatadas promesas de 100.000 viviendas nuevas a lo largo de esta legislatura que ahora acaba. A Belloch le pierden los calentones de boca, como cuando prometió que para el 2011 habría un metro en Zaragoza siendo que ni Fomento, ni Hacienda, ni la DGA, ni el propio Ayuntamiento han presupuestado ni previsto nada para el 2007 con este propósito. Pero esa es otra historia. Belloch nos aseguró que para el final de esta legislatura decenas de miles de pisos nuevos bordearían el Tercer Cinturón. A fecha de hoy esos terrenos ni están urbanizados ni hay máquinas trabajando en ellos. Eso sí, está en marcha una de las principales demandas de los jóvenes zaragozanos: el azud sobre el Ebro. Ironías aparte, nuestros jóvenes no podrán comprar piso, pero podrán pasear en piragua. Ejemplo de la política social del PSOE.

Pero volvamos al Gobierno de Aragón, del que forma parte el PAR. A fecha de hoy el Gobierno de Aragón tiene a dos empresas públicas trabajando en el sector inmobiliario, compitiendo con las empresas privadas: ARAMÓN, que con la excusa cada vez menos creíble de la promoción del esquí ha irrumpido en el mercado de las segundas residencias en zonas de montaña (con lo que no sólo no cumple ningún fin social, sino que contribuye más que nadie al destrozo medioambiental y paisajístico del Pirineo) y Suelo y Vivienda de Aragón, cuyas últimas promociones anunciadas se decantan por la construcción prioritaria de vivienda libre, entrando en un mercado claramente especulativo, orientado a una demanda que busca sobre todo una alternativa de inversión; un mercado a estas fechas sobredimensionado (50.000 viviendas vacías sólo en Zaragoza). Dos empresas que no cumplen ningún fin social, sino que pretenden meter la cuchara en el impresionante negocio inmobiliario.

Posiblemente, junto con el impresentable modelo que ofrecen estas dos empresas públicas, los otros dos ejemplos de la política urbanística del PAR lo ofrezcan los municipios de La Muela y Chimillas, que han ocupado abundante espacio en la prensa en estos últimos meses.

Y por último, y como ejemplo de la política del Gobierno de Aragón en el mercado del alquiler, bastará recordar que muchas otras Comunidades Autónomas tienen deducciones en el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta para el alquiler de viviendas, para promover esta alternativa. No es el caso de Aragón. La comarcalización, la televisión, las revistas de propaganda institucional, la proliferación de empresas públicas... Todo ello exige unos fondos que no pueden emplearse para tonterías como la promoción de alquileres.

No creo que sea el PAR quien pueda señalar la paja en el ojo ajeno...