¿Talante? ¿qué talante?
Escribía ayer Isabel San Sebastián un artículo titulado exactamente así, “Talento contra talante”, que ella pretendía aplicable lo mismo a Sarkozy frente a Royal que a Rajoy frente a Zapatero. Pero creo que se equivoca, al menos en el caso español. Creo que en Rajoy sí hay talento -bastante más que en algunos de sus más directos colaboradores y en el de ciertos barones regionales, que consiguen empañar el de su líder- pero en el caso de Zapatero no hay ningún talante, ningún buen talante, sino auténtica vileza, puro cálculo y ausencia de principios.
Con el paso del tiempo he pasado de asombrarme con las decisiones y comportamientos del personaje a irritarme profundamente. Ahora, y especialmente ya con el juego macabro de las listas de ANV, he pasado a despreciarlo. Porque pienso sencillamente que Zapatero es simplemente un ser despreciable, repugnante, esencialmente y por encima de cualquier otra consideración, malvado; un personaje que manipula a la opinión pública y se ríe de sus ciudadanos. Porque no se comportaría así si no tuviera una pobrísima opinión de los españoles a quienes gobierna. En el fondo nos desprecia.
Iñigo Urkullu, dirigente del PNV lo ha resumido claramente, alertado por la futura alianza entre Batasuna y PSOE, que puede, como en Cataluña ha pasado a CiU, apartarles del poder: “el pacto de las listas de ANV con Batasuna se ha hecho con la calculadora en una mano y con la Ley D’Hont en la otra”.
Observen: sólo se han recurrido aquellas listas de ANV presentadas en los municipios donde Batasuna no obtenía u obtenía una pobre representación. Pero se han respetado las de aquellos municipios en las que tenía un gran respaldo. Lo que permite al PSOE salvar la cara, aparentar firmeza, sin que de esa aparente firmeza derive una pérdida de representación electoral para Batasuna o sus sucedáneos. Todo para mantener engañada a la ciudadanía. Una maniobra repugnante seguramente preparada por Zapatero, Rubalcaba y Fenández de la Vega y ejecutada disciplinadamente por Conde Pumpido.
El Supremo dice que la Fiscalía y el Gobierno debieron instar la ilegalización de ANV.
Tomo prestadas algunas preguntas de Rosa Díez sobre los criterios asumidos por Conde Pumpido para pedir la ilegalización de unas listas de ANV y no de otras: ¿Por qué sólo se recurren las listas de ANV que tengan dos o más conocidos militantes de Batasuna? ¿Cómo un mismo partido puede ser continuidad de ETA en Ermua y no en Oyarzun, por ejemplo? ¿Cómo es posible que para impugnar las candidaturas de ASB se utilice el criterio de la Ley de Partidos -no siendo ASB un partido- y con las listas de ANV -que sí lo es- se busque la contaminación individual? ¿Por qué el Fiscal no aplicó ese estrambótico criterio de “dos o más” para impugnar al PCTV? ¿Porque hubieran caído todas?
Los siguientes pasos si el electorado lo permite: gobierno de coalición en Navarra con los nacionalistas; inicio de conversaciones para la integración de Navarra en el País Vasco; sustitución del PNV por un gobierno de coalición entre Batasuna o cualquiera de sus franquicias y el PSOE (a semejanza de Cataluña); referéndum de autodeterminación; efecto cascada en el resto de España...
¿Las consecuencias para el futuro, para la estabilidad institucional y económica?: simplemente pavorosas.
¿Ese es el proyecto de Zapatero? Más parece una venganza.
Escribía ayer Isabel San Sebastián un artículo titulado exactamente así, “Talento contra talante”, que ella pretendía aplicable lo mismo a Sarkozy frente a Royal que a Rajoy frente a Zapatero. Pero creo que se equivoca, al menos en el caso español. Creo que en Rajoy sí hay talento -bastante más que en algunos de sus más directos colaboradores y en el de ciertos barones regionales, que consiguen empañar el de su líder- pero en el caso de Zapatero no hay ningún talante, ningún buen talante, sino auténtica vileza, puro cálculo y ausencia de principios.
Con el paso del tiempo he pasado de asombrarme con las decisiones y comportamientos del personaje a irritarme profundamente. Ahora, y especialmente ya con el juego macabro de las listas de ANV, he pasado a despreciarlo. Porque pienso sencillamente que Zapatero es simplemente un ser despreciable, repugnante, esencialmente y por encima de cualquier otra consideración, malvado; un personaje que manipula a la opinión pública y se ríe de sus ciudadanos. Porque no se comportaría así si no tuviera una pobrísima opinión de los españoles a quienes gobierna. En el fondo nos desprecia.
Iñigo Urkullu, dirigente del PNV lo ha resumido claramente, alertado por la futura alianza entre Batasuna y PSOE, que puede, como en Cataluña ha pasado a CiU, apartarles del poder: “el pacto de las listas de ANV con Batasuna se ha hecho con la calculadora en una mano y con la Ley D’Hont en la otra”.
Observen: sólo se han recurrido aquellas listas de ANV presentadas en los municipios donde Batasuna no obtenía u obtenía una pobre representación. Pero se han respetado las de aquellos municipios en las que tenía un gran respaldo. Lo que permite al PSOE salvar la cara, aparentar firmeza, sin que de esa aparente firmeza derive una pérdida de representación electoral para Batasuna o sus sucedáneos. Todo para mantener engañada a la ciudadanía. Una maniobra repugnante seguramente preparada por Zapatero, Rubalcaba y Fenández de la Vega y ejecutada disciplinadamente por Conde Pumpido.
El Supremo dice que la Fiscalía y el Gobierno debieron instar la ilegalización de ANV.
Tomo prestadas algunas preguntas de Rosa Díez sobre los criterios asumidos por Conde Pumpido para pedir la ilegalización de unas listas de ANV y no de otras: ¿Por qué sólo se recurren las listas de ANV que tengan dos o más conocidos militantes de Batasuna? ¿Cómo un mismo partido puede ser continuidad de ETA en Ermua y no en Oyarzun, por ejemplo? ¿Cómo es posible que para impugnar las candidaturas de ASB se utilice el criterio de la Ley de Partidos -no siendo ASB un partido- y con las listas de ANV -que sí lo es- se busque la contaminación individual? ¿Por qué el Fiscal no aplicó ese estrambótico criterio de “dos o más” para impugnar al PCTV? ¿Porque hubieran caído todas?
Los siguientes pasos si el electorado lo permite: gobierno de coalición en Navarra con los nacionalistas; inicio de conversaciones para la integración de Navarra en el País Vasco; sustitución del PNV por un gobierno de coalición entre Batasuna o cualquiera de sus franquicias y el PSOE (a semejanza de Cataluña); referéndum de autodeterminación; efecto cascada en el resto de España...
¿Las consecuencias para el futuro, para la estabilidad institucional y económica?: simplemente pavorosas.
¿Ese es el proyecto de Zapatero? Más parece una venganza.
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