¿Zaragoza, 14 de abril de 2009?

Porque tal día como hoy aparece en la prensa aragonesa la siguiente noticia:

El escolta de Boné participó como su asistente personal en foros de la ONU

Ante los hechos que van saliendo en los medios de comunicación estos días es lógico que los ciudadanos acaben preguntándose si el Gobierno de Aragón es una Administración pública o un cortijo. Todos los indicios apuntan a lo segundo.

Pero este tema va a poner a prueba a dos instituciones diferentes, que debieran ser complementarias en los ámbitos judicial y político: la Fiscalía y la oposición.

Si la oposición, ante la eventualidad de tener que pactar en un futuro con el PAR, elude pedir responsabilidades, será mejor que eche la persiana y cierre por liquidación. Porque quien renuncia a ser oposición, renuncia a ser alternativa. Espero que no sea el caso.

Preguntas básicas: ¿Cuántos nos han costado a los contribuyentes aragoneses los viajes al extranjero del escolta de Boné? ¿Cuáles son las razones de seguridad que aconsejan la presencia del escolta en lugares exóticos donde el consejero Boné es un perfecto desconocido y aparentemente su seguridad no peligra más de lo que pueda peligrar la de cualquier turista español? ¿Por qué sólo el consejero Boné necesita escolta en el extranjero y no el resto de consejeros del Gobierno de Aragón?

Tengo la sospecha de que en los próximos meses se va a hablar mucho del consejero Boné, más de lo que él quisiera.

Leí en un foro de Internet que el escolta era sólo una pieza pequeña en la trama de La Muela, pero tan importante como el clavito que une las varillas de un abanico. Es la clave.

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