Es imposible

Hay muchas cosas imposibles o difíciles de creer en el asunto de la retirada de las tropas españolas de Kosovo.

Por ejemplo, es imposible que Carme Chacón anunciara la retirada de las tropas sin el consentimiento, conocimiento o, más probablemente, sin instrucciones directas de Zapatero.

Es imposible que Bernardino León desautorizara a la ministra sin el consentimiento, conocimiento o, más probablemente, sin instrucciones directas de Zapatero.

Es imposible que Carme Chacón se reafirmara en su anuncio inicial sin el consentimiento, conocimiento o, más probablemente, sin instrucciones directas de Zapatero.

Lo que demuestra que Zapatero no sólo es un perfecto incapaz, irresponsable, que adopta sus decisiones a impulsos sin analizar sus consecuencias, sino que, una vez más, es un mentiroso compulsivo y constante.

No sólo les miente a sus rivales o al conjunto de los españoles, sino a sus más directos colaboradores, a los que usa sin consideración ni respeto.

Sorprende que un personaje como éste haya podido llegar a la presidencia del Gobierno, y más aún que haya podido ser revalidado una segunda vez. Me producen una gran envidia esos países donde sus ciudadanos eligen a sus gobernantes aplicando mayores niveles de exigencia.

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