martes, junio 21, 2011

Dios confunde a quien quiere perder

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¿En qué manos estamos?

Me cuesta entender determinados comportamientos, que por su inoportunidad y falta de lógica, revelan una pérdida de equilibrio y ponderación preocupantes. Y más si quien los tiene es un gobernante.

Observen esta Resolución del Ayuntamiento de Zaragoza, publicada en el Boletín Oficial de Aragón el pasado día 16 de junio:


La toma de posesión del alcalde se produjo el sábado, día 11 de junio, y ahora se ha sabido que los pliegos se remitieron a los boletines oficiales el día 7 de junio y el día 8 se publicó en la web municipal, con el alcalde Belloch en funciones. Algo que quizás no sea ilegal -no lo sé-, porque si lo fuera implicaría la nulidad de pleno derecho de todo el procedimiento y de la misma Resolución adoptada, pero que revela una inquietante falta de respeto democrático. ¿Y si por la causa que fuera no hubieran prosperado los pactos con CHA e IU y finalmente no hubiera sido investido alcalde?

El propósito del concurso no puede ser más sorprendente:


Observen que la noticia ha tenido 163 comentarios en la edición digital del Heraldo de Aragón, lo que es un claro indicador del pasmo e indignación que ha suscitado. Porque todos ellos son coincidentes en la crítica. No hay ni uno solo que sea favorable.

Además de lo disparatado del asunto, empezando por gastar más de dos millones de euros para intentar ahorrar, queda de manifiesto la infrautilización o falta de confianza en sus funcionarios -¿para qué están, entonces?- y, más sorprendente aún, en el abundante personal eventual de confianza -llámenlos asesores- de que se ha rodeado, y que evidentemente no han debido ser seleccionados por sus conocimientos o cualificación profesional.

Porque el Ayuntamiento dispone de un centenar de técnicos de administración general, con el escalafón máximo de la administración, el A-A1, compuesto por ingenieros, arquitectos, economistas y licenciados en Derecho, así como un servicio de Modernización y Desarrollo Organizativo, cuyas tareas son similares a las que se quieren encomendar.

Pero hay más:


A todo lo anterior añadan, por tanto, la impresionante falta de respeto al electorado que demuestra.

Y esto recapacítenlo especialmente sus votantes: esa falta de respeto de Belloch y su equipo va dirigida precisamente y de manera casi única a ellos, y sólo a ellos, a quienes le votan.
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1 comentario:

francisco dijo...

Pues esto no es ni más ni menos que la tendencia que durante 12 años han llevado la coalición PSOE-PAR. Mediante empresas interpuestas (SODEMASA, SIRASA, Aragón suelo y vivienda, etc...) el PAR y el PSOE, han repartido puestos de trabajo a los familiares, amiguetes, chupaculos (perdón, pero es muy descriptivo). Ahora que la fiesta se ha acabado, y que el alcohol provoca fuertes dolores de cabeza , es el momento de depurar el "organismo público" con zumos, agua, baños, hidromasajes, etc...Y para ello, lo mejor es estar vigilantes, y que en el caso de la DGA, ninhggún amigo histórico de las fiestas (22 años de trayectoria les avala)dominen totalmente la nevera y la bodega... Hay que vigilar que la economía se gestione adecuadamente


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