La entrada de Aragón en la Eurorregión Pirineos Mediterráneo fue un error estratégico de primer orden, fruto de la sumisión de nuestro presidente autonómico hacia Cataluña.Nuestros intereses más próximos se hallan en el Valle del Ebro.
La postura de la Generalitat en el conflicto de los bienes eclesiásticos sirvió para que Marcelino pudiera escenificar más tarde un acto de dignidad anunciando su salida de la Eurorregión. Una forma de corregir el error inicial sin reconocerlo como el error que fue.
Marcelino Iglesias dice que Cataluña «ignora y menosprecia» a Aragón por el arte sacro
Sólo PSOE y PP respaldan el anuncio de Iglesias de dejar la Eurorregión
Sabemos que el gobierno aragonés se ha negado a interponer cualquier tipo de recursos frente a las decisiones administrativas de la Generalitat, a pesar de la existencia de informes jurídicos que lo aconsejaban y que se han mantenido ocultos a la opinión pública y a las fuerzas de la oposición. Y sabemos que tanto el PSOE como el PAR se han negado a censurar en las Cortes de Aragón el papel jugado por la Generalitat por no considerarla responsable de la negativa a devolver los bienes, y responsabilizando, por el contrario, a las autoridades eclesiásticas catalanas. ¿Por qué, entonces, se anunció la salida de la Eurorregión? ¿Tiene algo que ver la Iglesia catalana con la Eurorregión? ¿Se pretendía presionar así al obispo de Lérida?
El papel jugado por Marcelino Iglesias en todo este penoso asunto es más que sospechoso, propio de un agente infiltrado del catalanismo. ¿Para quién trabaja Marcelino?
Marcelino y los bienes eclesiásticos
APUDEPA
Ahora se suma una sospecha más. Vean el blog de la Eurorregión. ¿Estamos fuera de la Eurorregión o fue sólo un anuncio falso, otro más, para consumo interno? Observen que en la página web de la Eurorregión, actualizada, sigue apareciendo Aragón como integrante de la misma.
Eurorregión Pirineos Mediterráneo
Y ya para acabar de redondear el hallazgo, presten atención al nombre con que aparece nuestra comunidad en el mapa: Aragó.
6 comentarios:
Que "Marcelí" es un esbirro del nazionalismo catalán es algo bastante conocido, él es de los que hablan catalán en la intimidad.
Por otra parte, no sé qué utilidad tienen esas estructuras de cooperación transfronterizas llamadas eurorregiones. A mi me parecen un intento de construir los "Estados Unidos de Europa" acosta de pasar por encima a los estados nacionales que integran la unión y creando regiones artificiales transnacionales, cuyo objetivo es disolver el sentimiento nacional y el control de cada estado sobre sus territorios. Ya sé que esto hoy por hoy no es así, pero tiempo al tiempo...
Un saludo.
A República Rojigualda:
Escribir eso mismo, que Marcelino es un esbirro del nacionalismo catalán, aunque dicho con palabras más suaves, ha supuesto que algunos amables contertulios que de vez en cuando entran en el blog sugieran que podría estar incurriendo en delito, y que podría ser denunciado por el amigo Marcelino.
No me siento especialmente conturbado por ello. Ser un esbirro catalanista no es delito ni siquiera algo ilegal; quizás sí ilegítimo -carente de legitimidad- cuando has sido elegido para defender los intereses de Aragón y de los aragoneses, y los sacrificas a los intereses de Cataluña y de los catalanes... o de los catalanistas.
Pero si trato de explicarme con cierta lógica y sobre todo, algo que me gusta especialmente, hacer predecible su comportamiento, debo reconocer que eso, el considerarlo vendido a los intereses catalanes, lo explica todo. E incluso en una colisión de intereses, como las muchas que ha habido, especialmente por la avaricia o ambición catalana y nunca por la nuestra, puede anticiparse con bastantes probabilidades de acierto su respuesta y su comportamiento.
Y cuando algo se confirma con anticipación: pasará exactamente eso... y pasa, es que el diagnóstico es correcto.
Un cordial saludo.
Oroel
¡Qué equivocados estáis!. Marcelino no es ningún esbirro del catalanismo ni de nada que termine en ismo salvo marcelinismo y los bienes de la franja, ya lo dije una vez y creo que en este blog, le importan un bledo, exactamente igual que al alcalde de Barbastro y a la famosa comisión que presidía el inefable Ramón Miranda. O, mejor dicho, les vienen de maravilla para desviar la atención de otras historias mucho más jugosas y de evolución cada vez más incierta, como, por ejemplo, Aramón. Puede, sólo puede, no me vayan a empapelar, que si ha aceptado enredarse en una estupidez de la envergadura de Gran Scala, de forma tan impropia de un astuto ex seminarista como él, es porque está cogido por los huevos en sus montañitas de Aragón. La referencia, muy crítica, de ayer en El País a la especulación que acompaña a las estaciones de esquí y, en particular a las de Aragón, ha debido levantar ampollas en el Pignatelli.
un saludo muy cordial
Me deprime Madriz y sus aires de capital del imperio. Me identifico mucho más con nuestros generosos vecinos catalanes. Compartimos muchas cosas.
Respecto a los bienes, ya comenté hace tiempo a mis amigos del enorme error que se cometía iniciando un proceso eclesiástico. El camino es el proceso judicial. Ya saben, un juez dicta, la policia ejecuta. Sin embargo, si dicta un Papa, ¿quien ejecuta?
El incumplimiento de las sentencias vaticanas no hacen más que darle la razón a mi abuelo: "Supermaño nunca te fies de los curas".
(Don Ernesto, no lo digo por usted, allí donde esté, que usted sí que era un cura de p... madre).
Estimado Supermaño:
A mí me gusta Madrid, aunque también me gusta Barcelona. Pero una de las cosas que más me gusta de Madrid es ver que ondea en ella, en sus numerosos edificios oficiales, la bandera de España. Es mi bandera, ya sabes.
La realidad es que he descubierto con horror y con tristeza que me gustan mucho más otras ciudades españolas que esta Zaragoza de nuestros pecados. Como dice mi cuñado: “Zaragoza se ha convertido en la capital del mal gusto”. Y es verdad. Y con el tiempo se ha perdido la proverbial simpatía de sus habitantes. Somos una población hosca. Y tan sucia... Vas a Sevilla y resplandece, la gente usa las papeleras, son simpáticos, amables, se conduce con razonable fluidez... Y qué decir de las ciudades del norte: ni un papel por el suelo, ni una pintada...
Te recomiendo vivamente que leas el artículo de Ángel Garcés Sanagustín, profesor de Derecho Administrativo, en el Heraldo de hoy. Es la firma invitada. Te copio un párrafo que no sé si explica muchas cosas o por el contrario abre muchos interrogantes. A mí, desde luego, me encantaría poder interrogar sobre ello a tu admirado Marcelino: “Y todo ello a pesar de contar con un excelente informe que guardó bajo siete llaves cuando descubrió que ponía de manifiesto todas las irregularidades cometidas a orillas del Segre. Es un suceso valleinclanesco: un informe que hay que ocultar porque da la razón a la parte que lo ha solicitado”.
Observa que es difícil dar una explicación sobre los motivos por los que se ha ocultado ese informe, que ni se ha empleado ni se ha dado a conocer durante años, hasta que se ha filtrado. Yo tengo una explicación, que conoces, y que permite comprender éste y otros hechos: el de la sumisión de Marcelino a otros intereses que antepone a los nuestros. Podrás estar o no de acuerdo con ella, pero no me negarás que le da coherencia al cuadro: los planetas giran en sus órbitas y el sol acaba saliendo por donde se había previsto. ¿Puedes dar tú otra explicación más coherente y que explique mejor estas y otras cosas?
Mientras alguien no me abra los ojos y me ofrezca una teoría mejor, seguiré pensando que el Premi Estel que le concedió el Ajuntament de Bellpuig a tu admirado Marcelino por su catalanismo -o por su apoyo al catalanismo- está muy bien dado.
Un cordial saludo.
Oroel
No pude leer el artículo y tampoco conozco la historia del informe al que te refieres. No me duele reconocer que no sigo con atención el "asunto de los bienes" así que poco puedo discutir. Repito que nos equivocamos de vía, fue un error acudir a la eclesiástica, se debe iniciar de inmediato la reclamación judicial.
Creo que el gesto de retirarnos de la Eurorregión es suficientemente importante. A mi, como persona que le gusta el hacer equilibrios en las ugas pirenáicas, me duele porque es asignatura pendiente de esta tierra establecer más lazos de unión con nuestros vecinos franceses, por lo que espero nos incorporemos en el futuro.
Zaragoza,
¡cómo me gustaría extenderme en este tema!
Intentaré resumir. Supongo que conocerás la archiconocida anécdota de Luis Buñuel paseando por la calle Alfonso de Zaragoza. Una vez hubo regresado de su exilio en México y Francia ya había rodado alguna película en España (Tristana). Pues bien, en el momento de mayor reconocimiento internacional del cineasta, paseando por la calle Alfonso se le acerca una pareja de mediana edad y con mucha educación (eso sí) le espetan: "Don Luis, su última película... flojica, eh, flojica..."
No es un mito nuestra baja autoestima. Es nuestra más cruda realidad.
Seguro que amas esta ciudad, pero te parece flojica, en algunos aspectos muy flojica.
Conoces, igual que yo, su pasado reciente, conoces su presente. Sabes como yo, lo rápido que ha crecido y lo que va a suponer el 2008.
Para gustos, colores. Has nombrado ciudades que tienen otros encantos, pero la nuestra también los tiene. Lamento también el tema de las pintadas pero tengo que decirte que, con toda seguridad, de las 5 grandes Zaragoza es la más limpia... y no es la menos amable.
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